La «pregorexia», también conocida como el terror a engordar en el embarazo, es un trastorno alimenticio que afecta a mujeres embarazadas y se caracteriza por un miedo obsesivo a aumentar de peso durante la gestación. Este trastorno desencadena una serie de comportamientos restrictivos en relación con la alimentación y el ejercicio físico excesivo, poniendo en riesgo tanto la salud de la madre como la del feto.

Es importante destacar que la pregorexia no es un término médico oficialmente reconocido, pero se utiliza para describir esta preocupación desproporcionada por el aumento de peso durante el embarazo. Aunque no existen estadísticas exactas sobre la prevalencia de este trastorno, se estima que afecta aproximadamente al 20% de las mujeres embarazadas.

¿Qué es la pregorexia?

La pregorexia se caracteriza por una constante preocupación por la figura y el peso, incluso durante el embarazo. Las mujeres que sufren de pregorexia temen aumentar de peso y ver alterada su apariencia física, lo cual puede conducir a comportamientos extremos como la restricción alimentaria y el exceso de ejercicio físico.

El término «pregorexia» proviene de la combinación de las palabras «pregnancy» (embarazo en inglés) y «anorexia». Sin embargo, es importante destacar que la pregorexia no es equivalente a la anorexia, ya que no se trata de una enfermedad de base psiquiátrica, sino de un trastorno específico relacionado con el embarazo.

Síntomas de la pregorexia

Los síntomas de la pregorexia pueden variar de una mujer a otra, pero en general se caracteriza por una obsesión extrema por el peso y la imagen corporal. Algunos de los síntomas comunes de la pregorexia pueden incluir los siguientes:

1. Negación del embarazo o rechazo de la barriga creciente.
2. Excesiva preocupación por el aumento de peso y el aspecto físico.
3. Evitar o restringir ciertos alimentos considerados «engordantes».
4. Practicar ejercicio físico de forma excesiva o compulsiva, sin tener en cuenta las recomendaciones médicas.
5. Sentimientos de culpa o ansiedad intensa después de comer.

Es importante tener en cuenta que estos síntomas no se presentan en todas las mujeres que experimentan preocupación por el aumento de peso durante el embarazo. Sin embargo, si alguno de estos síntomas se hace presente de manera constante y afecta negativamente la calidad de vida de la madre, es fundamental buscar ayuda profesional.

Riesgos de la pregorexia para la madre y el feto

La pregorexia puede tener graves consecuencias tanto para la madre como para el feto. Al restringir la ingesta de alimentos importantes para el desarrollo adecuado del bebé, se pueden producir deficiencias de nutrientes esenciales, lo que puede llevar a un bajo peso al nacer y problemas de crecimiento durante la infancia.

Además, la falta de nutrientes suficientes en la dieta de la madre puede afectar negativamente su propia salud y bienestar. La restricción alimentaria puede provocar desequilibrios nutricionales, debilidad, fatiga y dificultades para afrontar los cambios emocionales propios del embarazo.

Por otro lado, el exceso de ejercicio físico puede aumentar el riesgo de complicaciones durante el embarazo, como parto prematuro, desprendimiento de placenta y lesiones musculares. Es fundamental tener en cuenta que, durante el embarazo, el cuerpo de la mujer experimenta cambios naturales y necesarios para albergar y nutrir a un nuevo ser. La pregorexia dificulta estos cambios y puede afectar negativamente el crecimiento y desarrollo fetal.

Importancia del apoyo social y profesional en casos de pregorexia

En casos de pregorexia, el apoyo social y el acompañamiento profesional son fundamentales para superar este trastorno y garantizar una gestación saludable. Las mujeres que experimentan pregorexia necesitan comprensión y apoyo por parte de sus familiares, amigos y parejas, quienes pueden ayudarles a cambiar su perspectiva y mitigar su miedo a ganar peso.

Además, buscar ayuda profesional es un paso crucial para enfrentar la pregorexia. Un profesional de la salud con experiencia en salud mental y trastornos alimenticios puede brindar orientación y apoyo emocional, así como establecer pautas nutricionales adecuadas para el embarazo. También puede trabajar en la mejora de la autoestima y la imagen corporal de la mujer, promoviendo una relación saludable con el cuerpo y la alimentación.

La terapia cognitivo-conductual y la terapia de grupo han mostrado ser eficaces en el tratamiento de la pregorexia, ya que ayudan a identificar y cambiar patrones de pensamiento negativos y ofrecen un espacio seguro donde las mujeres pueden compartir sus experiencias y sentimientos.

Recomendaciones para una gestación saludable sin caer en la presión estética

Es importante recordar que el aumento de peso durante el embarazo es absolutamente normal y necesario para el desarrollo adecuado del feto. No hay una regla única para todas las mujeres, ya que el aumento de peso saludable durante el embarazo puede variar en función de factores como el índice de masa corporal (IMC) previo al embarazo, la edad materna y el estado de salud general.

A continuación, se presentan algunas recomendaciones para una gestación saludable sin presiones estéticas excesivas:

1. Consulta con un profesional de la salud: Un médico o nutricionista especializado en embarazo puede ofrecer pautas específicas sobre la ingesta de nutrientes, el aumento de peso recomendado y el ejercicio físico adecuado.

2. Alimentación equilibrada: Es importante seguir una dieta equilibrada y variada, que incluya alimentos ricos en nutrientes como frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras y grasas saludables. Evitar la restricción alimentaria y consultar con un profesional si se tienen preocupaciones relacionadas con la alimentación durante el embarazo.

3. Ejercicio moderado: El ejercicio físico moderado y adaptado a las necesidades del embarazo es beneficioso tanto para la madre como para el feto. Consultar con un profesional de la salud para obtener recomendaciones y evitar el exceso de ejercicio.

4. Aceptación y amor propio: Apreciar los cambios que el cuerpo experimenta durante el embarazo y comprender que son naturales y necesarios para el crecimiento del bebé. Cultivar la autoestima y recordar que la belleza va más allá de la apariencia física.

5. Conecta con otras mujeres embarazadas: Hablar con otras mujeres embarazadas y compartir experiencias puede brindar apoyo emocional y una sensación de comunidad. Participar en grupos de apoyo o clases prenatales puede ser beneficioso.

6. Evitar la comparación: Cada embarazo es único y cada mujer experimenta cambios en su cuerpo de manera diferente. Evitar compararse con los estándares de belleza irrealistas y centrarse en la salud y el bienestar propios.

Conclusión

La pregorexia es un trastorno alimenticio preocupante que puede tener graves consecuencias tanto para la madre como para el feto. El miedo obsesivo a ganar peso en el embarazo puede llevar a comportamientos restrictivos en relación a la alimentación y el ejercicio físico excesivo, poniendo en riesgo la salud y el desarrollo adecuado del bebé. Es fundamental buscar ayuda profesional y contar con el apoyo social necesario para superar la pregorexia y garantizar una gestación saludable. Adoptar una visión equilibrada y realista del aumento de peso durante el embarazo, así como cultivar el amor propio y la aceptación del cuerpo, son pasos importantes hacia una maternidad saludable y feliz.